29/5/13

¿Guardería o en casa?

Querido tú:


Una de las muchas dudas que nos entran a las personas que tenemos hijo es esta: ¿Debería llevarle a la guardería o lo dejo en casa con mi madre/tíos/hermanos/etc? Digo a los que tenemos hijo porque es el momento exacto en el que tienes que plantearte esto, pero todos tenemos opinión obviamente, tengamos hijos o no.




Yo, como madre y desde la voz de la experiencia, voy a acercarte mi forma de ver esta duda, que cuando la tenía en la tripa (a Noa) ya me planteaba.





Uno de los miedos más comunes al pensar en llevar a nuestro bebé a la guardería es los sentimientos del bebé, pensamos que al no estar con su familia, gente que ya conoce con la que ha estado desde que nació, se va a sentir mal, que no lo va a pasar bien e incluso que quizá pueda llegar a coger una "depresión" por no estar con los suyos. Inmediatamente al pensar eso te viene a la cabeza la idea de decir "¡NO!" a llevarle a la guardería, porque cómo vamos a dejar que nuestros hijos se sientan "indefensos" y mal estando sin nosotros, x horas y con gente que son extraños para ellos y que ni siquiera sabemos como les van a tratar, lo que queremos es que ellos se sientan a gusto y  estén lo más felices posible, y la mejor opción hasta entonces parece dejarles en casa con nosotros o con algún familiar muy cercano.
En casa nuestro bebé se sentiría como siempre, en su entorno, con su familia, sus juguetes, siendo él el centro de atención, comiendo en su silla o en el regazo de su familiar, durmiendo en su cuna y con el olor de sus sábanas, casa y de la persona que está siempre con él. Visto así parece ser un entorno muy cómodo y agradable a la par que familiar. El bebé no echaría de menos nada y no extrañaría por lo que no habría motivo de tristeza o algo parecido.
A la hora de desarrollarse como persona, iría a su tiempo, sin presiones, sin "carreras" por así decirlo. Aprendería a comer solo a su tiempo, a ir al baño, a hablar, a descubrir materiales, etc. Esto en cierto modo, no resulta bueno del todo, ya que la parte social no la estaría cumpliendo, a no ser que llevásemos a nuestro bebé todos los días al parque para que se relacionara con otras personas.

Sin embargo, en una guardería, esto sería diferente. Esto y todo.

En la guardería el principio sería duro, gente nueva, otros niños, dejar de ser el centro de atención, no habría el mismo cariño que en casa y ni las sábanas ni el colchón sería el mismo que el de su cama. A primera vista, para él sería un cambio muy radical porque echaría en falta todo lo que en casa tiene a su alcance, incluso el entorno y la movilidad en él. Para que este cambio no sea tan radical existen los llamados "Periodos de adaptación". En dichos periodos, los niños acuden a la guardería durante un par de horas los primeros días, luego se quedan a comer y más tarde pasan el día entero, esto les ayuda a que no sea tan radical y que se vayan a acostumbrando a las personas adultas que cuidaran de ellos. Pero aunque todas los "contras" citados tengan mala pinta, incluso son educativos y les ayuda mucho a los niños sufrir esos cambios.
En casa solemos tener a los niños como en una burbuja y estamos siempre detrás, literalmente, para que en cuanto pueda ocurrirles algo llegar a tiempo y detenerlo. Los niños tienen que desarrollarse e incluso darse algún que otro pequeño golpe para que sepa y recuerde que esa cosa que ha hecho duele y que no lo tiene que volver a hacer (lo digo por experiencia, Noa una vez tocó el horno puesto y se quemó un poquito y desde entonces no lo vuelve a tocar ni siquiera frío ya que se acuerda de aquella experiencia), no es que les cree un trauma, no, si no que se acuerdan de que esa acción tiene repercusiones. Esto es algo que en la guardería les dejan hacer, es decir, el experimentar, obviamente están pendientes de que no hagan cosas que les pueda causar mucho daño o que se metan cosas en la boca que se puedan tragar y ahogarse, pero el que también experimenten con el gusto los juguetes, puede llegar a ser bueno.
A la hora de desarrollarse como persona, en la guardería se puede decir que es todo más rápido y más claro. Les enseñan a compartir con los demás compañeros, a hacer "bailes" con las canciones que les cantan y a la vez aprender el significado de las palabras cantadas con gestos, les enseñan a respetar los turnos de juegos e incluso a respetar los turnos de "brazos", es decir, si ahora la profe tiene a un bebé en brazos esperan a que lo deje para ir otro y así; también les enseñan rutinas como después que de comer hay que echarse la siesta. En las rutinas también les enseñan cosas específicas como por ejemplo a comer solos o pedir ir al baño y reconocer lo que es el papel higiénico y un pañal. Y como esto muchas más cosas.
Para resumir este párrafo diré que la guardería les vienen genial a los niños, lejos de sus contras, para desarrollarse como personas, acostumbrarse a ciertas situaciones y prepararse para otras que llegaran en un futuro, se hacen más independientes ya sea de los padres y como personas y aprenden a hablar y generalmente a andar antes por la "libertad" de movilidad que tienen. Es una buena manera de que los niños aprendan, experimenten y crezcan como deben hacerlo y de la manera más divertida y educativa.


Después de todo lo que he puesto pensaras que estoy de acuerdo con las guarderías y la función que tienen y es así. A mí personalmente, me daba muchísima pena tener que empezar de nuevo el instituto con tan solo dos meses que tenía Noa y también me daba cosa llevarla a guardería tan temprano por lo mismo, por lo pequeñita que era y por eso estuvo en casa prácticamente un año entero y sí, en ese año se desarrolló y mucho, es normal, pero comparándolo con este año que lleva yendo a la guardería no tiene nada que ver. Cada día, Noa, sale de la guardería con algo nuevo aprendido o haciendo cosas nuevas, sonidos o gestos nuevos y se nota, y echando la vista atrás, a la experiencia entre estar en casa y estar en la guardería, se nota aún más.
Lo malo de las guarderías, a parte de que cogen el primer año todos los resfriados habidos y por haber, es el elevado precio que tienen, pero para ciertas personas con problemas económicos existen ayudas que reducen las cuotas y si no se reducen es una verdadera lástima, porque es una experiencia demasiado estimulante para ellos como para tener que privarles de ello por los altos precios...

Y tú qué harías, ¿guardería o en casa con la abuela?


Un beso


Marina.

27/5/13

Las segundas partes nunca fueron buenas.

Querido tú:

Siempre o a menudo,  me preguntas si estoy dispuesta a volver con cierta persona,  si aún le quiero,  si creo que eso es lo mejor para Noa...  Suelo evitar responder a esto porque no quiero mentir ni que pienses que soy una guarra/lista/etc, o que me estoy aprovechando de esa persona pero esta vez no lo haré. Voy a dejar claro la lucha que se está librando en mi interior.

Mi Corazón:
   Como corazón estúpido que se ha enamorado de la sensación de amar y ser amado,  obviamente, quiere que todos esos momentos,  besos,  caricias, tardes viendo pelis,  palabras,  miradas, gestos que demuestran amor,  celos...  vuelvan,  porque a quién no le gusta le que quieran, a quién no le gusta ser querido...
No piensa en lo que una nueva relación significa, aunque no sea del todo nueva ya que tiene un historial. Para corazón ese historial está borrado,  sólo quiere ser amado y qué mejor persona para hacerlo que esa quien un día tuvo tu corazón y lo abrazó... Que le dio lo que necesitaba, amor...

Pero es mucho más complicado que eso...

Mi Cerebro:
    La parte racional de mí,  aunque en ocasiones me abandone y se pase al otro lado,  no al de los sentimientos sino a la parte de no pensar y dejarse llevar.  "Dejarse llevar suena demasiado bien", en esas ocasiones ese es su lema.
Cerebro ve una relación como una puerta abierta y sin seguridad al dolor. Sabe que no va a salir bien,  que sufriré y que si le apetece seguir su lema, yo también podré hacer daño y no quiere que eso ocurra.  Sabe que tengo cierta necesidad de ser querida por motivos oscuros del pasado pero no cree que volver atrás sea la manera.
Una nueva relación implica rayadas, celos, lágrimas, sonrisas, soñar despierta,  discusiones, tener que preocuparte por la otra persona,  no abandonarla,  quererla como quiere o necesita, tiempo...  Como todo,  tiene sus cosas positivas y negativas pero todo "hola" acaba con un "adiós" y más aún si la historia se ha repetido varias veces.
Cerebro no elimina los historiales,  los archiva y éste se lo sabe de memoria.

Lo que yo quiero decir es que han sido dos años en los cuales nos hemos conocido mucho mutuamente, hemos visto partes más desagradables de nosotros y otras que nos han enamorado.  Hemos vivido momentos increíbles y momentos pésimos, hemos reído y llorado,  discutido y hablado pero también hemos sido y nos hemos dejado.
Cuando una relación se acaba simplemente es porque algo ha salido mal,  no ha funcionado y ha hecho que el amor se acabe por segundos, minutos,  horas,  el tiempo que sea,  pero ha acabado.  Si esa relación acabada se vuelve a iniciar, corre todo riesgo de destruirse otra vez,  por lo mismo o por otra cosa,  quien sabe,  pero volverá a acabar.

Las segundas partes nunca fueron buenas y menos cuando se habla de relaciones amorosas.  Es como leer un libro ya leído, te emocionas e ilusionas al principio pero el final siempre será el mismo...

Pasa buena tarde,  un beso.

Marina.

15/5/13

Lluvia en la fiesta.


Querido tú:


Siento no poder contarte practicamente nada acerca de la fiesta de San Isidro de Noa, no porque no quiera si no porque las cosas que pasaron y las personas que estuvieron allí no quieren ser nombradas aquí, así que respetando lo que ellos quieren, no los mencionaré pero como Noa estuvo mucho tiempo de la fiesta con esas personas tampoco te puedo contar.

Lo único decirte que ella se lo pasó muy bien, jugó al juego de las sillas con más niños y todos estaban monísimos, vestidos de chulapos y chulapas, era un amor verles a todos tan chiquititos vestidos así. 
Al principio de la fiesta hacía Sol y todo iba bien porque no hacía frío ni nada pero de repente empezó a llover granizo, y menudas bolitas, pero como el patio de la guardería tiene un tejado estuvimos ahí debajo siguiendo celebrando la fiesta pero a penas se podía oír algo porque era tan fuerte el sonido del granizo con el tejado que tenías casi que gritar para poder oír a la persona que tuvieras a tu lado. Las profesoras junto con el director nos dieron claveles rojos y blancos a todos los padres que estábamos allí. Hicieron también una pequeña tómbola en la que había que lanzar una pelotita pequeña en unos vasos llenos de tierra con números, y si caía en uno te llevabas el regalo correspondiente a ese número.
Luego volvió el Sol y nos trajeron las profesoras a todos los que estábamos allí unas tostas que habían hecho y limonada casera y para los niños había patatas fritas, gusanitos naranjas y un poco de trina de naranja. Noa se puso toda la camiseta naranja entre los gusanitos y el trina jajaja, ella como siempre. 

Y eso es más o menos todo lo que te puedo contar. 
Y aquí te dejo una foto de Noa vestida ayer de chulapa.




Pasa un buen día.

Marina.


13/5/13

Una tortura para mí.

Querido tú:


Sábado:

Son casi las ocho de la tarde y mi Noa iba a volver de pasar con X todo el día y estaba deseando verla. Había preparado ya el baño, la ropa para cuando la saliera y la toalla para secara. Llegó la hora y mi bebé iba a estar conmigo de un momento a otro. Me llamó X al móvil para que bajara a buscarla y cuando bajé, después de un día prácticamente entero deseando verla y abrazarla, para asombro mío empieza a llorar. Se pone a llorar como una loca agarrándose a X y echándole los brazos a otro X, yo no podía creerme lo que veía. Me agrada la idea de que mi hija quiera estar con X  porque eso significa que la cuida bien y que se siente a gusto con él/la pero mi orgullo como madre no opina lo mismo. Con cada lágrima que caía, con cada llanto que oía mis ojos más se inundaban y mis fuerzas por evitar llorar eran aún más grandes. Al final cogí a Noa, aunque ella seguía sin querer venirse conmigo, me subí a casa y ella lloraba y no quería entrar, cuando ya la pasé le pedí a mi abuela que se quedara con ella un momento que iba al baño, y no era para hacer mis necesidades aunque en ese momento si lo necesitaba. Nada mas cerrar la puerta tras de mí empecé a llorar, me derrumbé no podía soportar el ver como mi hija prefería estar con X en vez de conmigo y en como se había puesto a penas unos minutos.
Me hundía cada vez más cuando recordaba su llanto, me planteé si realmente era una buena madre, si lo estaba haciendo bien o si estaría mejor con él, y la simple idea de responder a todo con un sí, me hundía aún más. Yo, su madre, la que está a su lado noche y día, la que aguanta enfermedades y risas, la que está cuando ella más me necesita y la que nunca la dio de lado en ningún momento de sus preciosos dieciocho meses, esa siendo rechazada. En ese momento, me vino a la cabeza un recuerdo reciente, mi madre me escribió un cuaderno diario donde apuntaba todas nuestras batallas y victorias y hubo una, una derrota que se asemejaba con esto pero era al revés. Yo no quería irme con mi padre y tenía como unos dos años y medio, mi madre, cumpliendo el convenio que se había estipulado me llevó con mi padre a pasar el día. Cuando volví, por lo que leí, le dije a mi madre que era una mala madre, que no la quería, que por qué me había dejado que me fuera con él, ella, en el diario me lo contaba y me pedía que no la castigara así, que ella me quería que sólo hacía lo que tenía que hacer. Sé que visto así la situación quizás no tiene mucho parecido pero en esos momentos para mí la tenia, sentía que estaba siendo castigada por ella y que se estaba olvidando de mí ... Pero de repente escuché algo, un sollozo que decía : "mamá", sí, era mi bebé que me estaba llamando porque quería estar conmigo, me buscaba y me necesitaba, así que me lavé la cara y me la sequé y me fui a buscarla para bañarla y darla de comer, etc.

¿Adivina dónde durmió esa noche? Exacto, conmigo.
No pude evitarlo, necesitaba sentirla mía, cerca..


Espero que pasea buena noche, un beso.


 Marina.

Mi pequeña chulapa.

Querido tú:

Sé que hacía tiempo que no te escribía nada sobre Noa y por eso mismo, y aprovechando que dentro de dos días es San Isidro, voy a hacerlo. Y es más, te voy a poner dos entradas.


Mi Noa ya va camino de los dieciocho meses, dentro de unos pocos de días, y ella cada vez está más grande y hace más cosas.
Gracias a la guardería a lo que le enseñaba yo en casa, empezó hace un par de meses como máximo, a manejar los cubiertos ella sola y a intentar comer la comida con ellos sin ayuda de un adulto, a día de hoy puedo decir que ya come sola y que lo único que le cuesta más a la hora de comer es el yogur, por eso de que está en un sitio pequeño y que no le permite mover mucho la cuchara, y menudo mal genio tiene. Cada vez que la intento ayudar, porque como bebé que es no se le termina de dar del todo bien al pinchar con el tenedor trocitos pequeños, empieza a mover el cubierto y hace el intento de tirarme el plato de la bandeja de la trona, menuda es, pero bueno, normalmente si se lo adelanto con cariño y despacio no me hace eso, y si lo hace, pues castigada medio minuto, más o menos, mirando al rincón para que piense en lo que ha hecho, y eh, que lo piensa y no lo vuelve a hacer jajaja.


Otra cosa que estoy intentando en casa pero que aún en la guarde no lo han hecho es el tema de hacer caca en el váter, porque es mucho más cómodo para ambas, ya que a Noa se le suele escocer mucho el culito con frecuencia a pesar de que le eche crema, y de esta manera no le ocurriría tanto o llegaría a no pasarle. Logré que hiciera caca una vez, pero ya no lo he conseguido más, cada vez que la veo que empieza a hacer fuerza la llevo pero nada, se le corta y ni en el pañal lo hace, eso sí, a los 20 minutos la tengo que cambiar el pañal porque lo que no hizo antes lo hizo después, menuda tía.

Ya dice muchas palabras sueltas y para referirse a varias cosas utiliza el mismo monosílabo lo que pasa es que te lo señala y sabes que es o por el contexto. Dice: caca, tata, tate, nene, nena, ca (que se refiere a chaqueta o calle), bibi, tete, tetitas, chochete, pipis (aunque lo dice con acento británico, así tipo pepes, super graciosa), gua gua, ga-ga (gato) y alguna se me perderá por ahí, también sabe reconocer a los animales cuando los ve y a hacer sus sonidos, por ejemplo el pato, el elefante, el caballo, el perro, el cerdo, etc. Y también reconoce las partes de su cuerpo como ojos, nariz, manos, pies, tripa, pelo, boca...
En este plan la verdad es que en este último mes ha mejorado bastante porque antes me lo señalaba todo y era en plan: ah ah, y ahora intenta decirlo o si no le dices que diga algo y lo intenta imitar, es super gracioso. Por ejemplo, los viernes, cuando voy a buscarla a la guardería, nos solemos despedir con un: "hasta el lunes" y ella también lo dice: "a nunes", pero bueno, eso es mejor que nada jajaja.

Una cosa, que me saca un poquito de quicio es el tema de vestirse y desvestirse sola. De repente te la puedes encontrar sin zapatillas (que las llama pie) y sin pantalones, o se quita la camiseta y te pide que le pongas la chaqueta de la calle. Sí, esa es mi hija, toda una exhibicionista jajaj No, pobrecita. Lo que es es coqueta, que la encanta ponerse cualquier cosa de ropa que encuentre por la casa, sea suyo o no, y si sabe que lo que ha cogido es de mi primo Mario, va corriendo a intentar ponérselo y dice: nene, nene.

Hay una cosa que quiero decir que hubo una vez que me comentasteis y era que hasta que no cumplen los dos o tres años no sienten ese ánimo de jugar con muñecas y cuidarlas. No lo digo en plan mal ni con segundas ni nada, sólo es contarte como curiosidad que ella tiene una muñeca y dos de las Tres Mellizas y las cuida de un manera graciosa no, lo siguiente. Cuando nos ponemos a comer, tiene que cogerse a su keka que la llama así y le da una cucharada a ella y otra se la come Noa, y con el agua pasa lo mismo. Cuando está jugando por el salón con ella dándola un paseo con el carrito o poniéndola el chupete o acurrucandola porque llora (sí, suena) y ve el agua en la mesa, intenta abrir la botella para darla a ella también, y como ve que ni ella puede y yo no se la quiero abrir, se enfada y se pone a revolcarse por el suelo. He aquí su genio de nuevo.

Y aparte de todas estas cosas que ha ido aprendiendo, en la guardería, hemos pasado por carnavales, cuenta cuentos y alguna que otra fiesta más, y como el miércoles es San Isidro, mañana, tienen una fiesta en el patio de la guardería a la cual tiene que ir disfrazada de chulapa. Ya la he cogido el traje y será con lunares rojos, el clavel también rojo y el pañuelo y el mantón blancos, una típica chulapa. Aún no la he hecho una foto porque hay que arreglarselo un poquito pero mañana le haré, y en cuanto pueda, prometo pasar las fotos al ordenador y subir una al blog contandote qué tal nos lo pasamos y para que veas lo graciosa que iba.

Ahora, y como he dicho antes, en un rato escribiré otra entrada contandote una cosa que me pasó este fin de semana con Noa, te lo quiero contar porque sinceramente, necesito que me des tu opinión acerca de ello, de si ves que exageré o cómo, porque yo tengo mi opinión sobre lo que hice y quizá me comporté un poco como una niña pequeña y egoísta, pero te necesito, y te pediría por favor que me comentaras.

Pues me despido de momento, hasta luego que escriba otra vez.


Un beso.

Marina.

1/5/13

Nuestros primeros días.

[ Quiero pediros perdón a los que me leéis por no haber escrito en todo este tiempo, he estado muy ocupada con Noa y los estudios, y entre eso y el lío emocional que tenía dentro de mi (y que sigo teniendo) no he encontrado un momento para hacerlo, y cuando lo tenía no me apetecía tener que encender el ordenador, ponerme y todo eso. Sí, he estado vaga aparte de ocupada, aunque ya lo habrás leído por mi twitter, si es que me sigues o lees, supongo. Lo dicho, lo siento, intentaré subir más entradas aunque ahora que se acerca la evaluación dudo que pueda, pero a ver que puedo hacer.]

Querido tú:

Como no sé muy bien qué contarte y me has mandado algunas peticiones/ideas sobre qué escribir, voy a hacerte caso y te voy a contar como fueron mis primeros días con Noa en casa.

Mi comienzo con ella, cuando nació y ya pude tenerla conmigo en la habitación fue bueno, lo primero ya que por la noche en el Hospital no se portó tan bien y para mí fue algo frustrante ya que se pasó llorando toda la noche y hasta las nueve de la mañana no se durmió. Aquella noche necesité ayuda de las enfermeras, que me dieran consejo sobre cómo evitar que le dolieran mucho los cólicos y me ayudaron y me dieron más opciones sobre cómo sacarle los gases. Así que nuestro primer día se puede decir que fue regular.
Cuando llegué a casa fue diferente, la primera noche me costó un poco tener que levantarme varias veces de madrugada para darle el pecho a Noa, aunque lo hiciera con mucha ilusión o amor hacia ella, ¿a quién le gusta tener que levantarse de madrugada? Pues eso.
Al día siguiente, ya que llegué casi de noche a casa, el día se desarrolló bien ya que apenas necesité ayuda, sabía darla el pecho y se pasaba durmiendo el día entero, pero como en alguna ocasión te he dicho (creo), llegó la hora del baño y los dos primeros días necesité ayuda de mi tía para poder hacerlo porque me daba mucho miedo que se me pudiera resbalar y que se ahogara, que no iba a pasar, pero me daba miedo.

Y esto fueron mis primeros días ya que todos era prácticamente iguales, lo que por así fue más difícil es el tener que lidiar con mis sentimientos, estaba madurando y no sabía que era eso, me estaba convirtiendo en madre pero aún tenía sentimientos de querer salir con mis amigos, pero tampoco podía, querer volver a clase pero tampoco quería dejar a mi bebé en casa. Tenía un lío de sentimientos con los que me resultaba difícil pelear porque no sabía como tenía que actuar,  era la primera vez que era madre, no sabía cómo tenía que ser, pero bueno.

Si quieres saber algo más en concreto de mis primeros días con Noa deja un comentario y te responderé en cuanto pueda, prometido.


¡Un beso y pasa un buen puente!


Marina.